El desconocido

La semana pasada le preguntaban, como en un centenar de veces con anterioridad, a un humorista, por qué solo parodiaba a los políticos de la derecha valenciana, por qué no caricaturizaba a Jorge Alarte. El cómico se limitó a responder, “porque a Jorge Alarte, no lo conoce nadie, no puedes exagerar sus gestos, porque el original es desconocido”. Podríamos decir que el actor se salió por la tangente, huyendo de la respuesta real, pero bien pensado, tenía toda la razón del mundo, al Secretario General del PSPV, llegas a sospechar que no le conocen ni sus propios conmilitones.
Y es que otra vez, no le salen bien al PSOE, sus experimentos en la Comunidad Valenciana.
Hubo quien pensó “He aquí la solución, Jorge Alarte, va a ser un remedo de Rodríguez Zapatero, un “bambi” mediterráneo”.
Hubo quien, en el laboratorio socialista de ideas, llegó a creer que lo que funcionaba bien, porque si que funcionaba bien, mayoría tras mayoría le avalaban, en un populoso municipio vecino de Valencia, podría marchar y cambiar el rumbo desastroso de derrota tras derrota, para toda la Comunidad. Y sucedió, que el alquimista se equivocó del cabo al rabo, otra vez más.
Porque vamos a ver, cayendo como le están cayendo, al PP, a sus dirigentes, desde hace unos cuantos meses, chuzos de punta por todos lados, que el PSPV no haya avanzado en las encuestas ni un solo milímetro, denota y pone muy claro, que mucho les está fallando a los socialistas valencianos.
No comunican, no saben, no son capaces de tomar el pulso a la sociedad en la que viven y mucho menos transmitir un mensaje de alternativa a los largos gobiernos populares. Ni lo hacen en Castellón, ni en Alicante, ni en Valencia. Ni en los grandes, ni en los pequeños núcleos urbanos.
Dicen,“Vamos a contactar con la calle”. ¿Cuántas veces lo han dicho? ¿Cien, doscientas, mil? Y cada día, están más alejados de todo, perdiendo militancia y electorado.
El penúltimo ensayo, trocear Valencia en diecisiete cachitos. Divide y vencerás ¿a quien?.
Alarte, sin soluciones políticas, solo espera que madure la fruta y caiga sola.
fmc 21 Octubre 2009