CARTA CON RETRASO

La Mostra de Cine se muere entre la indiferencia. Se muere pese al glamour, de segunda división, que se le inyecta a golpe de miles y miles de euros desde las arcas municipales. La Mostra es invisible, anónima y semi-clandestina. Ni la Mostra entra en la ciudad, ni ésta en la Mostra. Ni paseo de las estrellas, ni alfombras rojas logran reanimarla. Ni la inoportunidad de las comparaciones de la Valencia actual con la Habana de los 50, que realizó el engominado Andy García, ¡vete a saber en que estaba pensando¡, han servido para animar a un festival que ni se sabe para qué o para quien supervive.
Estaba en esas cosas que enrancian a Valencia, y va y cae en mis manos la fotocopia de una oferta-carta, bastante cutre pero autentica, en la que ofrecen, “para que pueda dirigirse a ellos de forma rápida y eficaz”, los nombres, direcciones con código postal y teléfonos de 1782 Concejales de Urbanismo o Medio Ambiente de toda España. En CD o en etiquetas adhesivas, para ser aun más directos. Todo por 150 euros de nada.
En mi ignorancia, pese a que me leo todas las columnas de Carlos Pajuelo, no tuve más remedio que comenzar a darle vueltas al asunto ¿Por qué los nombres y direcciones de los Concejales de Urbanismo? ¿Por qué no ofrecen las de los responsables de Cultura o de Cementerios?. La carta seguía brindando “información enteramente a su medida”, recalcaba con mayúsculas lo de “a su medida”, imagino que será por si alguien quiere saber, sin malicia por supuesto, si tal o cual Concejal de Urbanismo es aficionado a la pesca, a la caza, a los chiringuitos de carretera, a los montecristos, a viajar a Marrakech, al rioja, si los prefiere en maletines, en bolsas de basura o en paraíso fiscal. Y empecé a pensar muy mal. Y le di vueltas a lo de La Habana, Andy Garcia, los descendientes de Vito Corleone, el enriquecimiento exprés de algunos políticos y sobre todo que los ciudadanos somos unos palomos.
Se palpan todos los días unos niveles de sinvergüenzonería que clama al cielo. Están jugando con fuego. Estamos hasta el gorro del “y tu más”. Ni pactos por la transparencia ni historias de ese estilo. El Pacto es el que deberíamos firmar los ciudadanos para desparasitar el entorno.
Fernando Martínez Castellano 25 Octubre 2006

Publicado en Las Provincias 27 Octubre 2006

INFARTADA Y BLOQUEADA

Muchas veces se apela al victimismo para ocultar la incapacidad de hacer, de solucionar. Demasiadas veces, en nuestra tierra, se acude al “no nos quieren”, sin tener en cuenta que primero tenemos que ser nosotros mismos los que empecemos a querernos y los que demos los primeros pasos. Para todo. Esté en el gobierno central el que esté, se llame como se llame, sea del partido que sea. Nos dotamos de un Estatuto para algo. Se ha reformado el Estatuto para algo más que para convocar elecciones. Para bastante más que para estar utilizando las Instituciones como frentes electoralistas. Anti lo que se mueva. Anti lo que no se mueva. Instalados en las barricadas, incapaces de olfatear que el personal, el elector, está bastante hartito.
Saciado de que los unos y los otros, no asuman responsabilidades políticas de nada. La cosa no va con ellos cuando pintan bastos, cuando las cosas se salen de madre.
Igual después de escribir estas líneas se ha vuelto a producir otro atasco-colapso aun más espectacular que el del 16-O. Igual por suerte para todos, no. Sea como sea, Valencia puede presumir de tener uno de los peores responsables de Circulación de España. Ahora, eso sí, un probado mago en alzar las culpas hacia el escalón de arriba, bueno de arriba no, de más arriba. Un auténtico, dicen que así lo reflejan las encuestas, proveedor de votos para la oposición. Solo hay que observar las pocas críticas, no sea que corrija el rumbo, que le hacen desde EU y PSPV.
El mismo día que la señora Alcaldesa presentaba en Venecia, como pudo ser en Sydney, por lo del Puerto y la Opera, que en las Casitas Rosa de la Malvarrosa, por lo del antes y después, los redundantes proyectos de futuro, unas horas antes la Valencia del presente, victima de la incompetencia, atascada se asfixiaba en un mar de bocinas, tubos de escape, cabreos, impaciencias, buses ensardinados.
Claro que tenemos unos accesos indignos, claro que estamos olvidados por los gobiernos centrales desde los tiempos de Maricastaña, claro que nuestro gobierno autonómico se gasta más en fastos y humos que en hechos, todo eso es cierto, tan cierto como que a los responsables municipales de Circulación les faltan ideas y les sobran coches y excusas.
Fernando Martínez Castellano 17 Octubre 2006

Pulicado en Las Provincias 20 Octubre 2006

LA COSTILLA RERECALIFICADA

A Vicent Plasensia le susurraron, en pleno “Vino Español” en la Plaza de Manises, celebrando el Nou d’Octubre, la noticia de la posible candidatura de José Bono, el ex ministro pesoeo amigo de Zaplana, a la Alcaldía de Madrid. Los cinco sentidos de Vicent le hicieron chiribitas, pese al cacao sonoro que había, entendió todo, su vista alcanzó kilómetros, en un momento vio eriales recalificados, su olfato percibió los aromas de las tintas de los billetes de quinientos, su piel se erizó al recordar el roce del ladrillo y similares. Por unos instantes, tan alegre y asombrado quedó, que cometió el error de bajar la guardia justo en el momento en el que una de sus vecinas de apreturas, moviendo los brazos, como las aspas del autogiro de De la Cierva, para proteger su espacio vital de copa, tortilla y canapé, le atizó un codazo en el costillar derecho que le ha provocado, a Vicent, a más de una costilla rota, astillada, medio desprendida, un estado de piltrafeo similar al de un seleccionador nacional de fútbol que ha dejado de contar con los beneplácitos de los medios de comunicación madrileños. Vicent, convaleciente, se consuela repitiéndose que todo sea por el negocio que otea por allá por los horizontes mesetarios.
Negocio tiene que haber mucho y muchos, se abren nuevas vías y posibilidades. Todo un mundo. Emprendedores del Siglo XXI, es el nombre que, si no está registrado, Carlitos Plus quiere dar a su empresa de productos que giren alrededor de la galaxia del golf. Carlitos ha echado mano de calculadora multiplica el número de municipios que van a autorizar campos de golf en su término, a su vez lo multiplica por el número de jugadores, por el número de palos, bolas, bolsas, caddies, semillas y le salen unas cifras tan tan que un día de estos va a fletar un autobús para recoger a los alcaldes que queden despistados y hacerles saber de su proyecto “Ponga tres o cuatro campos de golf en su municipio”.
Y eso que lo de los campos de golf será como lo de los video clubs, los bingos y el destape en los ochenta, el Todo, aburridos, del todo a la Nada
Al segundo negocio del futuro conseguir las rerecalificaciones de los campos de golf a huertos de tomates aunque estos sean sintéticos.
Fernando Martínez Castellano 11 Octubre 2006

Publicado en Las Provincias 13 Octubre 2006

CEMENTO VERDE

Cuentan las crónicas que en la posguerra, la carencia de casi todo espabilaba los ingenios, los fogones españoles fueron testigos de cómo se hacia posible lo imposible. Entonces, triunfaba, gustaba el Arroz de conejo sin conejo. Fe y hambre.
Ahora, sesenta y tantos años después, aquí en Valencia, la prodigiosa, se está iniciando una obra de cemento sin cemento. Lo de “con” y lo de “sin” no lo motivan las penurias, ¿será por cemento?, solo es consecuencia de los calores preelectorales.
Mucha fe y de mucha más curiosidad ante los anuncios y resultados semifinales de la obra del cemento verde.
Parto del principio de que la plaza porticada del tramo Vetjes Tu, la considero un pegote de masa gris, gris de cemento, en medio de uno de los espacios más espléndidos y frondosos del jardín del Viejo Cauce. En su día, en la maqueta, nos pierden las maquetas, debió de quedar de lo más resultona, alguien, divinamente incauto, creyó que aquello podía ser como uno de esos lugares en los que uno se encarama en un cajón y lanza una soflama a los cuatro vientos. Pasado el tiempo no se ha sabido que hacer con ella, con la plaza, que poco a poco ha sido colonizada por la población que está pero no está, que habita pero no habita, que duerme pero no duerme, tal como sucede bajo el puente de Nuevo Centro. Total que en los pórticos se han ido acumulando cartones, colchones, mantas raídas y ríos de orines, dando al paraje entre pinares, un aspecto mugriento y un pespunte de inseguro al caer la tarde. Para que andar con circunloquios, todo esto hacía molesta y prescindible el ágora del Vetjes Tu.
Una de las posibles soluciones, la más barata, hubiera sido la entrada de martillos neumáticos que redujesen los muros a la nada. Posteriormente una fiesta-plantada de árboles para integrar la superficie recuperada, al frondoso entorno.
Pero no, se ha preferido obra dura, para meter allí aulas, salones de actos, un anfiteatro y un espacio para otra maqueta. Dicen que todo esto se hará sin cemento. Misterios del Tercer Milenio. Por de pronto allí, en el Viejo Cauce, ya se amontonan los materiales para la obra dura, con el visto bueno de unas Asociaciones de Vecinos de las que se suele “pasar” en otros asuntos. Vaya, vaya
Fernando Martínez Castellano 5 Octubre 2006

Publicado en Las Provincias 6 Octubre 2006