Acabamos de pasar unas Fallas que van a hacer historia. No va a ser este ejercicio pasado uno más en la cadena festera. Han quedado varios asuntos, algunos peliagudos, para reconsiderar. Para reflexionar todos y sobre todos Félix Crespo, Concejal de Fiestas. Nada bueno presagian los enfrentamientos habidos entre vecinos, pues vecinos son los falleros y los no falleros. Porque hay que corregir, regular, o como queramos llamar a lo que debe de cambiar, aunque sea de puntillas, sin hacer ruido. Tiene trabajo el señor Crespo, ¡Ay si al menos ya estuviese creado el Consejo Social de la Ciudad!.
Me han dicho que se están recogiendo firmas para hacer, creyentes y no creyentes, un homenaje al Ángel de la Guarda que se le encomendó que sobrevolase sobre la ciudad de Valencia. Los firmantes quieren solicitar al Ayuntamiento un homenaje público, encargando a Calatrava, a Foster o a Pedro Santaeulalia, un monumento, monolito, o columna trajana, en el que se reconozca el trabajo a destajo que realiza, el celestial protector, en los primeros veinte días de Marzo. La explosión de la furgoneta en la calle Azcárraga solo ha sido un enorme susto. Susto que tendrá que servir como el gran aviso para que las cosas no puedan pasar a más, para que la fiesta no mute a tragedia. Anda la pólvora muy suelta, como si no hubiera demasiado control sobre su almacenamiento y traslado. La pestuza de orines, que es mucha, se quita con barrederas y agua a presión, los efectos de la pólvora incontrolada ya son otra cosa.
Me ha llegado un correo electrónico en el que me anuncian, e invitan a adherirme, la puesta en marcha de la Asociación de Amigos de los Buñuelos, amigosdelosbunyuelos@gmail.com, abierta a todo el mundo, sin cuotas ni de alta ni de las otras. Declaran que solo pretenden, proteger esa especie próxima a la extinción que son los auténticos buñuelos de calabaza. Denuncian las tropelías que se están cometiendo bajo el nombre “buñuelos”, casi tantas como se cometen con el de “paella valenciana”. Aseguran que si el Concejal de Sanidad presume de haber retirado 80 kilos de “masas fritas”, el decomiso debería de haber sido de 8.000, no por malas condiciones sanitarias, sino por ofender al gusto y al olfato.
Fernando Martínez Castellano 21 Marzo 2007
No hay comentarios:
Publicar un comentario